Laureana Wright fue de las primeras mujeres de la historia en practicar uno de los fundamentos esenciales del feminismo: reconocer y visibilizar el trabajo hecho por sus congéneres. De hecho desobedeció lo mandatos religiosos de San Juan Crisóstomo, quien decía: «Cuando la primera mujer habló, provocó el pecado original».
Laureana no sólo habló, sino que dio voz a otras muchas mujeres y las hizo referentes para la historia de la humanidad.
“La mujer, hundida siempre en el obscurantismo, no ha hecho más que seguir dócil y obediente la senda que le ha trazado el hombre, y marchar de humillación en humillación por el triste camino de la obediencia, vendida unas veces, comprada otras, sierva las más, y sacrificada siempre, según el carácter de las diversas épocas porque han ido atravesando los pueblos». Fragmento de La emancipación de la mujer por medio del estudio.
Guerrerense, nacida un 4 de julio de 1846. Una mujer regida bajo el signo de Cáncer, sensible y solidaría. Desde pequeña fue una ávida lectora, con apenas 16 años comenzó a escribir poemas que marcarían su permanente pasión por la escritura. Nunca tuvo miedo por mostrar sus expresiones liberales, desarrolló una gran inteligencia para compartir sus discursos feministas dentro de una sociedad conservadora y altamente machista.
A sus 38 años fundó el periódico feminista: Violetas del Anáhuac, el objetivo principal, fue iniciar el camino del periodismo hecho por mujeres. También se publicaban cuentos, ensayos, poemas, todos narrados desde la voz femenina. Fue aquí donde Laureana, propuso el voto para la mujer, la igualdad en educación y oportunidades laborales entre otras cosas. Durante ese tiempo comenzó a escribir sobre la vida y obra de distintas mujeres, esta labor daría pie a una de las obras más importantes para la educación y el feminismo.
Estos escritos serían recopilados y publicados en 1910, bajo el nombre de: Mujeres notables mexicanas. Fue así como en plena Revolución Mexicana, apareció un libro que plasmaba el papel de la mujer en la historia, la cual siempre había sido contada desde la óptica masculina. La primera mujer en aparecer es Atotoxtli, quien fue gobernadora de Tenochtitlán, suceso invisibilizado en la historia del México prehispánico.
También se puede leer sobre Mateana Murguía De Aveleyra, escritora y periodista, quién es descrita por Wright como una mujer activa y diligente.
Laureana Wright logró crear un camino de reconocimientos para relatar la postura femenina en casi todos los ámbitos.
Fuentes
http://www.heroinas.net/2012/11/laureana-wright-gonzalez.html