En el mundo de las carreras no es habitual hablar de pilotos femeninas, por lo general se tiene preferencia en los pilotos masculinos.
Eliska Junková nació el 16 de noviembre de 1900 en uno de los rincones del Imperio Austro-Húngaro, luego República Checoslovaca debido a la Primera Guerra Mundial. Era hija de un cerrajero.
En la historia de la Fórmula Uno muy pocas mujeres han podido entrar a este círculo selecto y entre ellas destaca Eliska por vencer en el gran premio de Nürburgring, en 1927. No obstante, esta no sería la única sorpresa.
Debutó en las competiciones automovilísticas en 1922, en la prueba de Zbraslav-Jíloviste, en las cercanías de Praga onduciendo un Mercedes y venciendo a sus rivales.
Al poco tiempo contrajo matrimonio con el exitoso banquero Cenek Junek, el cual ayudó para que Eliska entrara de lleno al mundo del automovilismo. Él tenía el deseo de ver a una mujer compitiendo a su lado o contra él, y en aquellos tiempos se discutía si las mujeres podían competir con los hombres o tenía que hacerlo por separado.
Eliska no tomo importancia a ese tipo de discusiones y pasaba mucho tiempo entrenando con su marido, en 1923 disputo su primera prueba con él y el debut en solitario fue en 1924 en la República Checa, alcanzando la fabulosa velocidad de 140 Km/h. Al llegar a la meta una multitud la ovacionó debido a que se escapó de todos sus rivales masculinos.
En 1926 conquistó su primer título internacional en la competición Zbraslav-Jíloviste y al mismo tiempo se convirtió en la primera mujer en ganar una prueba internacional.
Eliska llegó a la meta en su Bugatti Rayo Azul, ganando ante su marido por una diferencia de 1.3 segundos.
Gracias a su carrera exitosa empezaron a llegarle invitaciones del extranjero, en 1927 disputo por primera vez la prueba de Targa Florio en Sicilia, Italia. Poco después disputaría el Gran Premio de Alemania “Nurburgring”, donde lideró toda la prueba, tras haber perdido 28 minutos en reparaciones a su vehículo.
El constructor de autos Ettore Bugatti convenció a Eliska para disputar una vez más la prueba de Targa Florio en Italia. Al terminar la carrera Albert Divo fue a felicitarla, “Enhorabuena y gracias. Buena parte de la victoria se la debo a usted. Al sentir a un rival tan peligroso a mi espalda, he tenido que sacar el máximo de mí”.
Al llegar de nuevo el Gran Premio de Alemania “Nurburgring” ella fue suplente de su marido, sin embargo, en un tramo de asfalto derretido Cenek tuvo un accidente que le quitó la vida al instante y puso fin a la brillante carrera de Aliska Junková.
Fuentes:
https://www.radio.cz/es/rubrica/personalidades/eliska-junkova
http://www.automovilsport.com/historia/elizabeth/informa.html
https://www.curvasenlazadas.com/2011/03/22/eliska-junkova-la-reina-del-volante-2/
Reinasdelaselva 